
Tyson Fury peleará contra Oleksandr Usyk por el campeonato indiscutible de peso pesado.| Foto: Collage
Tyson Fury y Oleksandr Usyk paralizan el mundo del boxeo con su pleito unificatorio del peso completo
Especial Antonio Castillo
Caracas.- No será el match entre Muhammad Ali y Joe Frazier, o el de Mike Tyson contra Evander Holyfield, pero el combate de este fin de semana entre el gigante británico Tyson Fury y el ucraniano Oleksandr Usyk es una de las peleas más esperadas, ya que corona al primer campeón mundial indiscutido de la historia en la categoría de todos los pesos.
El enfrentamiento entre Fury, de 36 años, y Usyk, de 37, supone una de las grandes guerras de peso completo de la historia, ya que están en juego los cuatro títulos de la división máxima del boxeo rentado.
El combate estuvo rodeado de grandes expectativas, porque tardó en gestarse algo así como tres años y cuando se concretó, gracias al capital de Arabia Saudí, escenario de la pelea, el peleador británico se cortó el párpado izquierdo durante un entrenamiento el dos de febrero, 15 días antes de la fecha original.
Por supuesto que el pleito fue suspendido, mientras que Usyk criticaba la dilación, aduciendo que había sido un ardid de su rival, quien no estaba en condiciones físicas adecuadas para entonces.
Aunque no hay pruebas de ello, las especulaciones aseguraron que Tyson Fury pudo haber forzado el aplazamiento de la pelea, para llegar en mejores condiciones y ciertamente que las imágenes del Fury de febrero contrastan en mucho con el de mayo, pues muestra un cuerpo más trabajado.
Como sea, Tyson Fury llegó al combate en Arabia, como el campeón de peso completo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), faja que ostenta desde el 22 de febrero de 2020, cuando dio cuenta de Deontay Wilder a quien noqueó en siete rounds.
Desde entonces el gigante (2,06 mts) de Wythenshawe protagonizó cuatro peleas, pero solo en tres de ellas expuso el título mundial, y ahora en su quinta pelea, buscará refrendarse como monarca del CMB y de paso llevarse los otros cetros en juego en el Kingdom Arena de Riad.
Tyson Fury es considerado uno de los mejores peleadores de las últimas décadas. El espigado gladiador inglés ha dominado la categoría del peso pesado.
Con un récord inmaculado de 34 victorias (24 por nocaut) y un empate, Fury ha destacado desde su debut en diciembre de 2008.
El peleador británico viene de derrotar cerradamente al camerunés Francis Ngannou en un ardoroso combate en Riad, Arabia Saudí y es por ello que quiere disipar dudas, convirtiéndose en el campeón indiscutido del peso pesado.
Fury, conocido como el Rey Gitano, venció al excampeón camerunés de la UFC Francis Ngannou, el llamado “Depredador”, quien lo envió a la lona en el tercer asalto y estuvo a punto de noquearlo en el octavo, en el Boulevard Hall de Riad.
Fue tan cerrado el pleito, que los jueces plasmaron en sus tarjetas una decisión dividida: 95-94 a favor de Ngannou, más 96-93 y 95-94 por Fury.
Es de destacar que ese 28 de octubre del año pasado, no estuvo en juego la corona de Fury, y que el excampeón Mike Tyson había entrenado al púgil camerunés. Así las cosas.
Por su parte, Usyk es campeón de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Federación Internacional de Boxeo (FIB) y pone en juego todo el botín.
Está imbatible en 21 combates, de los cuales ha resuelto 14 por nocaut, y viene de derrotar a Daniel Dubois y ganar a Anthony Joshua por partida doble. Palabras mayores.
Los especialistas aseguran que Usyk es el peleador más temido dentro de un ring, debido a su técnica y poderoso golpeo.
Por lo pronto se asoma como el rival más duro que enfrentó Fury en su carrera. Desde que debutó profesionalmente en noviembre de 2013, Usyk se ha abierto paso con sus 1,91 metros de altura, y sus brazos que utiliza como aspas de molino.
Desde este sábado, habrá un solo campeón del peso pesado.