Wilfredo Tovar es un pelotero insustituible | Foto: Alejandro van Schermbeek
Antonio Castillo
Wilfredo Tovar representó dignamente al Caracas
Wilfredo Tovar fue el genuino representante de los Leones del Caracas en la Serie del Caribe, escenificada en el LoanDepot Park, en Miami, donde expuso nuevamente su talento tanto defensivo como al ataque.
El utility mirandino de 32 años ha sabido mantenerse activo en el beisbol gracias a una disciplina a toda prueba, disciplina que lo llevó a jugar en las Grandes Ligas con los Mets de Nueva York y Angelinos de Los Angeles de forma intermitente.
Fue en 2013 cuando fue llamado por primera vez por el equipo de Queens. Entonces, con 21 años, disputó siete partidos como suplente del infield, experiencia que se repitió en la temporada siguiente, jugando dos encuentros.
Se mantuvo en acción en las menores entre 2014 y 2019, concretamente en AAA, donde llegó a batear .321en 85 juegos de la campaña de 2019, vistiendo el uniforme de los Bees de Salt Lake, sucursal de los Angelinos de Los Angeles.
Esta actuación le valió el ascenso a las mayores con los Angels, equipo que lo utilizó durante 31 partidos, en los cuales bateó para .193 (de 83-16), con cinco dobles y cinco impulsadas.
En la zafra de 2021, tras batear para .276 (de 355-98) con el Syracuse AAA, regresó al Big Show, pero con los Mets, actuando en seis encuentros, en los que tomó 11 turnos y bateó dos incogibles (.182).
Entonces Wilfredo Tovar fue dejado libre por el beisbol estadounidense, y fue llamado por los Tecolotes de Dos Laredos, pero jugó en México apenas dos partidos.
Desde entonces ha concentrado todo su potencial con los Leones del Caracas en la LVBP, y con los Delfines de La Guaira, en la Liga de Verano local (LMBP).
Por cierto, con los Delfines de La Guaira en la campaña pasada, Tovar estuvo particularmente activo a la ofensiva, bateando para .293 (de 147-43), con seis dobles, cinco jonrones, 21 anotadas y 24 carreras anotadas.
Y con los Leones se mantuvo como uno de los argumentos insustituibles en el lineup del manager José Alguacil, quien llegó a utilizarlo a pesar de dolencias que mermaban su capacidad.
Sin embargo, nunca deslució en ninguna de las posiciones que defendió y en los turnos que asumió con responsabilidad y eficiencia.
Muestra de lo anterior, es que Wilfredo Tovar jugó en 54 de los 56 partidos del Caracas en la ronda regular, y en todos (16) los que protagonizó la novena melenuda en el round robin.
Globalmente entre ambas fases, Tovar consumió un total de 285 turnos, en los cuales despachó 75 incogibles, para dejar promedio de .263. Entre sus conexiones compiló 14 dobletes, dos triples, tres jonrones, anotó 40 y remolcó 31 carreras.
Pero independientemente de su trabajo al ataque, hay que destacar su solvencia defensiva, sobre todo en la antesala, donde ha lucido como un auténtico crack (como dirían los argentinos), decapitando cualquier batazo con malas intenciones.
Por eso Wilfredo Tovar estuvo en la Serie del Caribe, donde deslumbró a los aficionados que plenaron el LoanDepot Park, en Miami.
