Antonio Castillo
La ofensiva caraquista se atascó en el round robin
En la continuación del análisis de los factores que conllevaron a la eliminación del Caracas, tenemos que tocar el tema del round robin, donde varios elementos se conjugaran para que las cosas no salieran según lo planteado.
El propio manager José Alguacil reconoció que la ofensiva no funcionó en los momentos importantes, dejando a corredores anclados en las bases, muchos en posición anotadora.
Efectivamente, el ataque de los Leones, que había sido su punta de lanza durante la ronda eliminatoria, literalmente se congeló en la semifinal, no dejando opciones de avanzar a la fase decisiva.
A nivel colectivo el Caracas fue el tercer equipo con mejor promedio con .288 y el líder en jonrones con 53, mientras que en el round robin su ofensiva cayó a .251 (penúltimo, solo por encima de los Bravos de Margarita que solo batearon para .242).
Sin ánimo de generar odiosas críticas (no nos corresponde y no está en nuestra esencia de periodista de larga data), es obligatorio resaltar que jugadores como Gabriel Noriega, Harold Castro, Oswaldo Arcia, César Hernández o Aldrem Corredor, que batearon con soltura en la fase eliminatoria, fallaron en la hora clave.
Es así que Noriega, líder bate con .376 y 44 empujadas, apenas conectó para .204 de promedio (de 54-11), con 15 ponches, mientras se mantenía activo en el renglón de remolques con ocho.
Otro tanto sucedió con Harold Castro, nuestro héroe de la pasada campaña, en esta ocasión solo bateó para .200, en comparación al .315 que logró en la ronda regular.
En un post anterior dije que Harold Castro podía fallar las veces que quisiera, después de su gesta en la 2022-2023, pero ciertamente que no estaba de más conectar una línea que otra en el round robin.
Oswaldo Arcia, quien debido a lesiones jugó 12 encuentros, exhibió promedio de .200 (de 30-6, con un jonrón y cinco fletes: César Hernández, uno de los baluartes en la eliminatoria, tomó parte en 10 cotejos en la semifinal, en los cuales bateó para .217 con una impulsada; y Aldrem Corredor, otro protagonista del Caracas, cayó de .335 y 32 remolcadas en la eliminatoria, a .241 y apenas tres remolques.
Y el pitcheo no estuvo mejor, aunque la efectividad de los escopeteros caraquistas se instaló en 4.45 carreras limpias aceptadas en 141.2 innings, solo superado por los lanzadores de La Guaira (3.94) y Lara (4.22).
Individualmente, Anthony Vizcaya y Rubén Alaniz no estuvieron a la altura del compromiso que representó el round robin, permitiendo carreras en los innings postreros que hicieron mucho daño.
Vizcaya, tomado como refuerzo del Magallanes, deslució con una efectividad de 6.97, al permitir 13 imparables y ocho carreras en 10.1 capítulos, con siete boletos y un jonrón encajado.
A su vez, Alaniz desmejoró de firmar una efectividad de 1.31 en la fase regular a 7.27 en la semifinal, al aceptar13 hits y siete carreras en 8.2 entradas, con seis pasaportes.
¡Caraquistas Forever¡