El cambio de Eliézer Alfonzo jr fue de los peores de los últimos tiempos | Foto: Alejandro van Schermbeek

Antonio Castillo

X: @Leonatico

 

La inconsistencia hundió al Caracas (I)

 

La temporada 2024-2025 fue una de las peores de los Leones del Caracas en los últimos años, debido a una inconsistencia que abarcó todos los niveles de juego, léase pitcheo, oportuno bateo y defensiva, sin contar yerros estratégicos y cambios que no funcionaron.

En este último punto hay que destacar la transacción que llevó a Magallanes al joven receptor Eliézer Alfonzo jr, a cambio del veterano René Pinto.

Debemos aclarar que al momento del canje, la Gerencia Deportiva los Leones buscaba optimizar su defensa detrás del plato con un catcher solvente. En otras palabras, le dieron prioridad a la defensa sobre el potencial ofensivo de Alfonzo jr. ¿La razón? Contaban con un sólido arsenal de bateadores que hacía estragos en el circuito, y otro artillero, en realidad, no hacía mucha falta. Craso error.

Paralelamente, se contaba con que el prospecto Moisés Ballesteros se encargaría de la receptoría desde finales de noviembre, y que tanto los grandeligas Freddy Fermín y Salvador Pérez harían acto de presencia detrás del home plate, algo que no ocurrió.

Con esa rémora cargó el Caracas desde entonces, alternando detrás del plato a Pinto, Gabriel Lino y Francisco Arcia, quienes no marcaron diferencias defensivas, mientras que al ataque dejaron mucho que desear.

René Pinto bateó para .220, mientras que Lino dejó incipiente promedio de .208. Por su parte, Francisco Arcia tuvo average de .167. Entre los tres batearon dos jonrones.

Como contraparte, Eliézer Alfonzo jr culminó la fase regular en el decimotercer escaño entre los mejores bateadores del circuito, con .318 de promedio, producto de 50 inatrapables en 157 visitas al plato, entre ellos 11 dobles y siete cuadrangulares. El careta de 24 años redondeó la campaña con 36 carreras impulsadas y 11 anotadas. Sin comentarios.

En cuanto al pitcheo tenemos que el Caracas fue el peor equipo en este renglón, con una efectividad colectiva de 6.04, o sea que para tener opción al triunfo, los bateadores de los Leones debían anotar al menos siete carreras por confrontación.

Los escopeteros capitalinos permitieron 633 incogibles y 330 carreras limpias en 491.2 innings. Los 60 cuadrangulares que aceptaron fue la segunda cifra entre los ocho contendientes, solamente superado por los 70 estacazos que le asestaron a los lanzadores de Caribes.

La importación fue un desastre con Ronnie Williams (21.60 de efectividad), Aneuris Rosario (30.00), Colin Peluse (6.20) y Rickey Ramírez (6.00); mientras salvaban los muebles Sam Bordner con cuatro salvados y efectividad de 4.76, el zurdo Ben Braymer con balance de 1-1, efectividad de 3.69 con 27 ponches en 31.2 innings; y el colombiano Jhon Jairo Romero, quien empezó muy mal, pero encontró el ritmo hasta dejar EFE. de 2.52 en los 29 juegos en los que lanzó.

Mención aparte para los criollos Joshua Cornielly (1.40 de efectividad) y Carlos Hernández (2.20), quienes fueron el oasis en el desértico montículo melenudo.

¡Caraquistas Forever!