Luis Rubiales besó en la boca a la jugadora Jenni Hermoso | Foto: AFP

Luis Rubiales desencadenó una crisis en una España sacudida en sus cimientos

 

Especial | Antonio Castillo

 

Caracas.- Como el tango de 1940 de los argentinos Carlos Di Sarli y Héctor Marcó, popularizado como bolero en la voz del cubano Orlando Contreras años después, el sorpresivo beso que le atizó Luis Rubiales a la jugadora Jenni Hermoso en plena celebración del título mundial alcanzado por las españolas, pareciera que acabó con la vida deportiva del controversial presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).

Ha sido de tal magnitud dicho beso, que colocó en un segundo plano el sensacional triunfo de las jugadoras hispanas en el Mundial Femenino celebrado en Australia y Nueva Zelanda.

Hasta la feroz pugna política para estructurar un gobierno entre el Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo y el Partido Socialista de Pedro Sánchez, quedó en planos secundarios ante la “Novela Rubiales”.

Nadie (o en todo caso muy pocos) en España se recuerda de la ardorosa victoria sobre Suecia, esa que se definió en los últimos minutos y que le dio a las ibéricas el derecho de disputar la gran final en la lejana Sydney.

En ese encuentro de semifinales, las dos briosas selecciones llegaron empatadas 0-0 hasta el minuto 81 cuando Sara Paralluelo concretó el 1-0 a favor de España. Sin embargo, las suecas ripostaron casi de inmediato para igualar las acciones con tanto de Rebecka Lundqvist.

Finalmente las españolas levantaron la diestra en señal de triunfo con el gol decisivo de Olga Carmona en el 89.

La propia Carmona marcaría el gol más importante de su carrera ante Inglaterra, ese que le dio a La Roja su primer título mundial.

Pero ¿quiénes son Sara Paralluelo y Olga Carmona? sus nombres se vieron inexorablemente diluidos en el denso vapor que generó el beso que le estampó Rubiales a Hermoso. Así las cosas.

La prensa española se volcó con todo su arsenal a condenar la procaz acción del dirigente, recordando la ferocidad con la que atacaron en su momento al torero José Ortega Cano por el homicidio involuntario de Carlos Parra, víctima de un accidente de auto. Asimismo la cantante Isabel Pantoja fue útil presa de los diarios hispanos tras ser declarada culpable por la justicia de Málaga de dineros mal habidos.

Como sea, el punto es que los propios españoles se boicotearon y en vez de celebrar por todo lo alto una conquista inédita, lograda con talento, esfuerzo y tesón, prefirieron darle prioridad a un hecho que, reprochable desde todo punto de vista, empañó la gesta oceánica.

Un auténtico personaje

Luis Rubiales, de 46 años, preside la Real Federación Española de Fútbol desde el 17 de mayo de 2018. Antes lideró la Asociación de Futbolistas Españoles. Asimismo es vicepresidente de la UEFA.

Pero este exfutbolista canario no solo es cuestionado por sus acciones en la celebración de La Roja, donde además se tocó los genitales al lado de la mismísima Reina Letizia y su hija, la Infanta Sofía, sino por sus manejos dentro de la RFEF, la cual es señalada precisamente por no tratar a sus jugadoras a la altura. Se le acusa de ser “un señor con poder, cuyo instinto está por encima de todo”.

La política en el tapete

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso,  ironizó en sus redes sociales sobre el diferente trato mediático brindado al “impresentable comportamiento” de Rubiales y el “boicot” sufrido por la Vuelta Ciclista a España en Cataluña por parte de los independentistas que negocian con el actual presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. “Vivimos una manipulación total”, dijo Díaz Ayuso.

En todo caso, como dice la canción escrita por Héctor Marcó hace 83 años, un beso “sentenció el destino” de Luis Rubiales.