Antonio Castillo

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El Caracas de hoy es un equipo diferente

Los Leones del Caracas han protagonizado una campaña realmente positiva, lo cual ha desatado pasiones en su entusiasta fanaticada, después de años de sequía productiva que les había llevado a posiciones insospechadas, como ocurrió en la zafra 2020-2021 cuando finalizaron en el último lugar.

En esta temporada 2022-2023 de la LVBP los Leones culminaron primeros en la ronda regular con balance de 36 triunfos por 19 derrotas. De hecho, el equipo capitalino fue el único de los ocho equipos del circuito que no rebasó la cifra de las 20 debacles en esa fase.

De los 28 juegos que protagonizó como homeclub en el estadio Universitario, ganó 19, ratificando su supremacía.

El Caracas no perdió ninguna de sus series particulares, ganándolas todas con excepción de las efectuadas ante Tigres de Aragua y Caribes de Anzoátegui, las cuales igualó 4-4.

Por si fuera poco, el equipo melenudo fue el que más carreras anotó con 347, a razón de 6.3 rayitas por desafío. Además, sus pitchers fueron los que menos carreras permitieron con un total de 259 (4.7 por partido).

¿Las claves de esta notable cosecha? Pues un equipo balanceado, que pudo engranar bateo oportuno, pitcheo efectivo y sólida defensa.

En efecto, el Caracas fue el equipo con mejor promedio colectivo al ataque (.299), el que bateó más incogibles (582), más jonrones (58), y en consecuencia el que más anotó (346) y el que más produjo carreras con un total de 323. Además su OPS (promedio de embasado más slugging), fue el más alto del circuito con .824.

Con estos guarismos es lógico que el Caracas haya arrasado en la ronda eliminatoria con sus rivales de turno, aunque hay que aclarar que en los actuales momentos la situación se presenta de otra manera. Y es que con la salida del receptor Freddy Fermín, debido a directrices de los Reales de Kansas City, más la ausencia tentativa de José Rondón por razones médicas, tenemos que el teamwork de los Leones es otro.

Pero es que no estamos hablando de peloteros comunes, sino de la dupla que demolió a palo limpio el pitcheo rival, tanto así que entre ambos se llevaron cuatro de los galardones más importantes en cuanto a ofensiva se refiere. Fermín fue líder bate (.404), Novato del Año y Más Valioso, mientras que Rondón fue el Productor del Año y segundo en los listados del MVP.

Lo de Fermín se veía venir, ya que el pelotero de 27 años venía en franco ascenso en las ligas menores con los Royals, equipo que le dio carta blanca en Venezuela para que terminara de mostrar sus cualidades, pero la verdad es que nunca pensaron que el receptor brillara de la manera que lo hizo. Y en este sentido optaron por pararlo para que descansara antes del spring training, donde tendrá la oportunidad de ganarse el puesto de suplente del estelar cátcher Salvador Pérez, también venezolano.

Lo que no se veía venir es que Rondón, un inextinguible bateador y polivalente pelotero a la defensa, fuese a sufrir un peligroso cuadro de hipoglicemia, una peligrosa baja azúcar, que unida a una arritmia lo sacó del lineup. En todo caso ¡Caraquistas Forever!