DETROIT — Tarik Skubal señaló la semana pasada que su recuerdo favorito de los más de tres años que jugó junto al venezolano Miguel Cabrera fue verle batear un jonrón mientras nevaba en el Día Inaugural de la temporada 2021.
“Se deslizó en la segunda base porque no sabía que había sido un jonrón”, recordó Skubal. “Yo tampoco sabía si era un jonrón; me sorprendió que estuviéramos jugando. No sé cómo vió la bola blanca con toda la nieve que está cayendo. Se necesita un caballo de ese calibre para hacer eso”.
“Para mí, Miggy es un ícono”, siguió Skubal. “Muchos de mis mejores momentos, los mejores momentos en el béisbol, son de él consiguiendo algo. Ha habido mucha historia que he podido ver y de la que he formado parte, lo que es muy especial para mí”.
En una lluviosa noche de miércoles en Comerica Park, Cabrera recreó aquel cuadrangular, sólo que con un tipo de precipitación diferente. Y mientras Cabrera pasaba sobre el lodazal del infield en su recorrido por las bases para el 511mo jonrón de su carrera, no pudo evitar reírse.
Por el momento, el vuelacercas forma parte de un juego suspendido después de que una intensa lluvia interrumpiera el encuentro justo antes de la parte alta de la quinta entrada. Se reanudará a la 1:10 p.m. ET del jueves, en el punto donde se detuvo. El partido originalmente programado para el jueves comenzará unos 40 minutos después de que termine el duelo reanudado.
El cañonazo de Cabrera hacia la banda contraria lo empató con el miembro del Salón de la Fama, Mel Ott, en el puesto 25 de la lista de jonrones de todos los tiempos en MLB. Miggy también empató a Norm Cash en el segundo puesto de la historia de los Tigers, con 373 bambinazos.
Se cree que este último cuadrangular de Cabrera fue el primero en el que se aprovechó las nuevas dimensiones del outfield del Comerica Park. Se produjo en una de las zonas del parque que más le han molestado a lo largo de los años. Cabrera hizo swing a una bola rápida del abridor de los Reales, Jonathan Bowlan, y envió un batazo de 397 pies a través de las gotas de lluvia y sobre la pared entre el jardín central y el derecho. Con las antiguas dimensiones, la bola habría quedado en juego, pero pasó encima de la nueva valla.
A diferencia del jonrón en la nieve de hace dos años, Cabrera sabía que estaba fuera y no se deslizó en segunda base.
Dos entradas más tarde añadió un sencillo por el lado izquierdo del embarrado infield, y finalmente anotó con el jonrón de tres carreras de Tyler Nevin. Fue el hit número 3.170 de Cabrera en su carrera, todavía en el puesto 16 en la historia de las Grandes Ligas, a 14 de Cal Ripken Jr.
Para entonces, la lluvia había arreciado, lo que puso a los árbitros y al personal del Comerica Park en una batalla para conseguir que el juego llegara a las cinco entradas y se hiciera oficial. Pero al final, la lluvia fue demasiado intensa para mantener el terreno en condiciones.
Al suspender el juego en lugar de posponerlo, el jonrón todavía tiene una oportunidad de contar si pueden conseguir suficientes outs el jueves para hacer oficial el encuentro. Queda por ver si Cabrera podrá volver a batear en el juego. Estaba previsto que descansara el jueves antes de jugar los tres cotejos de la última serie de la temporada de los Tigres contra los Guardianes en el Fin de Semana de Celebración de Miggy.
Jason Beck cubre a los Tigres para MLB.com