José Altuve tiene al alcance la meta de los 3,000 hits | Foto: Thomas Shea-USA TODAY Sports

El pelotero venezolano José Altuve es reconocido como la principal figura de los Astros

 

Especial Antonio Castillo.- 

Caracas.- La transición de ser un pelotero, si se quiere rechazado, por su baja estatura (1,65m), hasta convertirse en figura franquicia de uno de los equipos élite de las Grandes Ligas, ha sido una auténtica historia de superación para José Altuve, el pequeño gigante de los Astros de Houston.

Desde sus inicios en los polvorientos campos de Maracay, pasando por su firma –por apenas 15 mil dólares- para jugar beisbol profesional, hasta conseguir el contrato más grande que haya logrado un segunda base en la historia, ha pasado mucho tiempo y se han derribado muchas barreras.

Muy pequeño

En 2005, con apenas 15 años, José Altuve se hizo presente en un “tryout” que los Astros de Houston montaron en Maracay, y el menudo pelotero destacó sobre los demás, debido más que todo a su coraje, a las ganas que tenía de hacerlo bien.

El propio Alfredo Pedrique, quien entonces fungía como scout de los Astros, reconoce que de inmediato le impactó la actitud de Altuve, a pesar de su baja estatura y de su poca masa muscular.

“De inmediato se le vio la habilidad para batear, el sonido del bate, al hacer contacto con la pelota me impresionó. Eso es lo que los scouts y técnicos siempre están buscando. Por su estatura me sorprendió con la fuerza que bateaba hacia el lado contrario, entre el jardín derecho y el jardín central. Nos llamó la atención que siendo un muchacho tan joven, tuviera ese dominio de batear hacia el otro lado. Además impresionó por la velocidad de sus piernas, ya que fue de los que mejores corrió, en aquellos tiempos en que se exigía velocidad en las famosas 60 yardas”, recordó Pedrique.

“Su insistencia, las ganas de superación, de querer recibir esa oportunidad, fue lo que sinceramente nos convenció. Son casos que a veces uno tiene la suerte de que se den y en este caso, gracias a Dios, Altuve ha tenido una carrera exitosa”, concluyó el técnico.

Tres mil hits

Los ciudadanos de Houston respiraron aliviados cuando las noticias de MLB reportaron que la organización había alcanzado un acuerdo de extensión con José Altuve, quien ha sido pieza fundamental para los texanos en los últimos años, y en este sentido había un interés mutuo en que el venezolano vistiera este uniforme hasta el final de su carrera en Grandes Ligas.

El último jugador franquicia de los Astros había sido Craig Biggio, coincidencialmente segunda base como Altuve, quien jugó toda su carrera en Houston (20 temporadas), llegando a conectar 3.060 hitis que lo impulsaron al Salón de La Fama de las Grandes Ligas.

Ahora, con este acurdo multianual, Altuve no solo se asegura un contrato por 125 millones de dólares, sino que en el próximo lustro tendrá la posibilidad de alcanzar la mítica cifra y de aspirar a un lugar en el Templo de Cooperstown.

Su agente Scott Boras, está al tanto de ello y en este punto le declaró al periodista Brian McTaggart:  “La duración de su contrato es muy importante para que pueda tener la oportunidad de conseguir 3.000 hits».

Las lesiones

El pelotero maracayero de 33 años parecía allanar el camino para ingresar de manera segura al llamado Club de los 3.000, pero las lesiones aparecieron y relantizaron su carrera hasta la meta deseada.

Entre los años 2014 y 2017, Altuve compiló más de 200 inatrapables por temporada, lo que elevó considerablemente sus expectativas de llegar a la meta más temprano que tarde.

No en balde registraba 1.244 hits en sus primeras siete campañas, a razón de un promedio de 178 incogibles por zafra. Según estas proyecciones, Altuve necesitaba de diez temporadas más para conseguir el objetivo, o sea que en 2027 –dentro de cuatro años- lo habría logrado.

Sin embargo, los inconvenientes físicos –aparte de la pandemia- se le han atravesado, al punto que ha bajado considerablemente su producción.

En la temporada anterior jugó apenas 90 encuentros, en los que conectó 112 hits, para completar zafra de 2.047 en 13 zafras..

Por lo pronto, el maracayero es uno de los 296 jugadores en toda la historia de las mayores en sumar 2.000 imparables en su carrera. Paralelamente, esos 2.047 hits es la quinta mayor cantidad entre los jugadores activos y le permite soñar con llegar a los 3.000 inatrapables, algo que solo han logrado 33 peloteros, el último de ellos el también venezolano –y maracayero- Miguel Cabrera.

Prudencia ante todo

Está consciente Altuve que el desafío de conectar los 953 hits que le faltan para completar 3.000 es complicado, y en tal sentido se muestra prudente.  “Es un largo camino. Vamos un hit a la vez”, dijo, aunque está claro que la oportunidad existe y está a su alcance.

Y más aún con este nuevo contrato de cinco años. Lo importante es mantenerse sano la mayor parte del tiempo, para así tener la posibilidad de batear un promedio de 191 hits por temporada para llegar a la tierra prometida en 2029, el último año de su pacto.

Entretanto, José Altuve es reconocido en Houston como un ícono de la ciudad, uno que permanecerá en el corazón de la comunidad,  una vez que se retire como pelotero activo.